José Emilio Pacheco
La entrevista completa en www.lapluma.com.mx en la sección trazos
Junio escribe un poema en la historia de Hermosillo. La humildad enorme del mayor poeta se apersona con gafas condescendientes con el sol.José Emilio Pacheco cuenta ya sesenta y siete años. Y ni el tiempo le ha quitado el dolor de parto al intentar la construcción poética.Vino por el tributo tal vez pendiente: Encuentro Nacional de Escritores Horas de Junio se lo otorga. No sabe de qué hablar ante la prensa. Por eso pide que conversemos. “...soy totalmente del siglo pasado, así que haré mi mejor esfuerzo por complacerle pero no tengo muchas posibilidades de hacerlo. Estoy abierto a sus preguntas en la medida que pueda contestarlas: ¿quién quiere romper el hielo?” --¿Qué implica para usted el tributo en Sonora? Pregunta que no rompe le hielo: sopla la escarcha de la tensión. Y el poeta ora. “No sé exactamente de qué se va a tratar. Implica un acto de generosidad muy grande que no esperaba y agradezco de la manera más sincera que te puedas imaginar, pero también implica algo que es la medida del paso del tiempo, no podría tener esto a los veinticinco años”. --¿Estás acostumbrado a los tributos? “No, para nada, no es que quieras dármela de modesto o fingir humildad, pero cuando comencé a escribir no existía nada de esto, ni que pensará en premio, ni en ruedas de prensa y salir en televisión, por eso estoy tan poco acostumbrado. Me parece muy bien que los medios te den atención y agradezco mucho, pero es como hablar una lengua extranjera, si uno no se acostumbra a hacerlo desde pequeño,
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